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Programa de Becas

Cuando inició nuestra Fundación, fue con la idea de ayudar a jóvenes de nuestro distrito de Tres Ríos, La Unión, para que pudieran continuar sus estudios de secundaria sin tener que preocuparse de cómo pagarlo. Trabajando con recursos propios y ayuda de amigos, fue un apoyo muy reducido, de apenas 10 jóvenes que pudimos identificar gracias a docentes de 6º grado en la Escuela Central de Tres Ríos. Así, con mucha ilusión de ambos lados, a inicios de 2011 dimos la bienvenida a un pequeño grupo de estudiantes de 7º año. Con el tiempo, poco a poco logramos reunir fondos para duplicar la cantidad en 2015.

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No fue hasta el año 2017 cuando, gracias al apoyo primero de Life Sciences Research Partners y luego la Foundation for Education to improve Family Planning, pudimos dar el salto a 100 estudiantes con beca, y actualmente 150. A la vez, ampliamos nuestro ámbito de actividad, de la mano con organizaciones aliadas que nos apoyan en el seguimiento. Actualmente, aparte en La Unión y Cartago, extendemos becas en Limón, Turrialba, Heredia, Curridabat y San José. 977 / 5.000 It wasn't until 2017 that, thanks to the support of Life Sciences Research Partners and later the Foundation for Education to Improve Family Planning, we were able to increase our scholarships to 100 students, and currently to 150. At the same time, we expanded our reach, working alongside partner organizations that support us in our follow-up efforts. Currently, in addition to La Unión and Cartago, we offer scholarships in Limón, Turrialba, Heredia, Curridabat, and San José.

The small introductory meetings of the early years have now grown into events with over two hundred people in La Unión alone. And although it requires a lot of preparation and organization, each new year fills us with the same energy and enthusiasm as in 2011. It fills our hearts with joy to know that the students in front of us, thanks to the support we receive, will be able to build their dreams of finishing high school and take a giant leap forward toward a future with fewer limitations.

Desde el inicio vimos nuestro papel muy claramente: no queremos tan solo dar útiles escolares y el dinero para comprar uniformes al inicio del año y pasajes de bus para ir a clases. Más allá de las becas, queremos brindar un apoyo real a nuestra población becada, ser una plusvalía y un recurso adicional en la vida de esas muchachos y esos muchachos.


Podemos lograrlo únicamente si también exigimos algo de nuestra población: mediante los reportes mensuales y el envío de notas, podemos ver cómo van durante el año, y en qué necesitan más apoyo.

 

Desde hace unos años también pedimos que los y las jóvenes hagan un trabajo comunitario supervisado (4 horas por mes) en una organización sin fines de lucro o el centro educativo donde siguen clases. ​

El fin es doble: hacer ver que no se debe disponer de dinero para poder hacer un aporte a la comunidad, y a la vez permitir a cada estudiante a ampliar su red de contactos. En unos casos, estos trabajos comunales han llevado a un empleo posterior, después de graduación. Y en casi todos los casos, a mucha satisfacción por el aporte realizado. 

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Debido a los requisitos, entre ellos: pasar el año, hacer los reportes mensuales y ejecutar el trabajo comunitario, lamentablemente tenemos que despedir parte de la población antes de que terminen los estudios. Aun así, hemos podido celebrar más de 100 graduaciones, lo que nos llena de mucha felicidad y nos motiva para continuar con nuestra obra.

En los últimos 10 años hemos apoyado a más de 500 jóvenes

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